Alpine entra de lleno en la era eléctrica con el lanzamiento de su primer SUV totalmente eléctrico, el A390. Este modelo marca un punto de inflexión para la marca francesa, que busca equilibrar rendimiento, rentabilidad y sostenibilidad ambiental. Las reservas comenzarán el 4 de noviembre para los poseedores del Alpine 390 Première Pass, y el público general podrá acceder a partir del 18 de noviembre.
El A390 llega justo cuando el icónico A110 está a punto de dejar de producirse, simbolizando la transición de Alpine hacia un futuro más versátil y eléctrico. Aunque más alto y pesado que su predecesor, el SUV conserva la esencia deportiva que caracteriza a la marca, al tiempo que amplía su atractivo a un público más amplio.
Tecnología de vanguardia para mantener la deportividad
A pesar de superar las dos toneladas de peso, Alpine ha desarrollado un sistema llamado Active Torque Vectoring, que gestiona activamente la distribución del par entre los dos motores traseros. Esta tecnología permite que el A390 mantenga la precisión y agilidad típicas de la marca, asegurando que la experiencia de conducción deportiva no se pierda por el aumento de tamaño y peso.
El enfoque de Alpine demuestra que es posible combinar las ventajas de un SUV eléctrico con la dinámica de un deportivo, ofreciendo a los conductores una conducción emocionante sin comprometer la seguridad ni la eficiencia.
Dos versiones, dos enfoques de rendimiento
El A390 se ofrecerá en dos versiones: GT y GTS.
La versión GT, con un precio desde 67.500 euros, equipa dos motores eléctricos que generan un total de 400 caballos de fuerza y una batería de 89 kWh, que proporciona hasta 555 kilómetros de autonomía según la versión. Su aceleración de 0 a 100 km/h en 4,8 segundos lo coloca entre los SUV deportivos más atractivos del mercado, combinando rendimiento y eficiencia eléctrica.
Por su parte, la versión GTS, que llegará a principios de 2026, eleva aún más el rendimiento gracias a un tercer motor delantero. Con una potencia total de 470 caballos y un par máximo de 824 Nm, esta versión puede alcanzar los 100 km/h en apenas 3,9 segundos, rivalizando directamente con modelos de lujo como el Porsche Macan 4S, que además es más costoso.
Equipamiento de serie y enfoque en el confort
Desde la versión GT, Alpine ha cuidado el detalle y la comodidad. El SUV incluye faros matriciales, llantas de 20 pulgadas, asientos deportivos en Alcantara calefaccionados y un sistema de sonido Devialet con 13 altavoces. La pantalla central de 12 pulgadas integra servicios conectados con 10 GB de datos y acceso gratuito durante cinco años, permitiendo al conductor mantenerse conectado y disfrutar de una experiencia tecnológica de primer nivel.
La carga rápida del A390 alcanza los 190 kW, lo que permite pasar del 15 al 80% de batería en menos de 25 minutos. Además, el vehículo incorpora un cargador bidireccional de 11 kW de serie, con opción a una versión de 22 kW, manteniendo una competitividad adecuada dentro de su segmento premium.
GTS: máxima deportividad y tecnología avanzada
La versión GTS, con un precio de partida de 78.000 euros, se distingue por un tratamiento más deportivo y exclusivo. Incluye llantas de 21 pulgadas, neumáticos Michelin Pilot Sport 4S, pinzas de freno de seis pistones y asientos de cuero Sabelt calefaccionados y con función de masaje. Además, integra el sistema Alpine Telemetrics Expert, pensado para los conductores que desean analizar su desempeño, y un paquete Driving que combina centrado de carril activo y estacionamiento automático.
Este enfoque convierte al A390 GTS en una propuesta capaz de satisfacer tanto a quienes buscan lujo y confort como a quienes priorizan la conducción deportiva y el rendimiento extremo.
Una nueva etapa para Alpine
Con el A390, Alpine no solo entra en el mercado de los SUV eléctricos, sino que también redefine su estrategia como marca deportiva. El vehículo logra mantener la esencia de deportividad y emoción al volante, al mismo tiempo que ofrece versatilidad, tecnología avanzada y respeto por el medio ambiente.
El A390 es un claro ejemplo de cómo las marcas históricas pueden evolucionar sin perder su identidad, adaptándose a las nuevas demandas del mercado y a la transición hacia la movilidad eléctrica. Para Alpine, este SUV representa el inicio de una nueva etapa, donde la electrificación y la deportividad pueden coexistir de manera armoniosa, ofreciendo al conductor lo mejor de ambos mundos.